martes, 17 de marzo de 2009

Niñas peor protegidas que el lince

La Iglesia Católica no para últimamente. En el Día Internacional de la Mujer no tuvo mejor ocurrencia que humillarla con un elogio a la lavadora. Desde que salió la noticia, hace unos diez días, no he oído a mujer alguna que no haya criticado dicho elogio. Después resulta que los lazos del Papa con los negacionistas del Holocausto van un poco más allá de lo que se pensaba. Pero no se queda ahí la rancia moralina catolica, no; pues hoy leo en el 20minutos lo siguiente:

Los obispos creen que en España se protege más a los linces que a los bebés

* Campaña de la Iglesia contra el aborto y a favor de la vida.
* "La vida humana no debe ser menos protegida que otros bienes", dicen.
* Se han colocado anuncios en 1.300 vallas publicitarias de 37 ciudades.

20MINUTOS.ES. 16.03.2009 - 14:43h

El secretario general de la Conferencia Episcopal, Juan Antonio Martínez Camino, ha presentado en rueda de prensa la nueva campaña de comunicación que va a poner en marcha esta organización de cara a la celebración, el próximo 25 de marzo, de la Jornada por la Vida.

En la polémica campaña, los obispos critican la nueva Ley del Aborto que ultima el Gobierno y comparan la protección al lince ibérico, especie en peligro de extinción, con la en su opinión escasa protección de los bebés. En el cartel se puede ver la imagen de un bebé junto a la de un lince con el sello de "Lince protegido". El lema de la campaña es "¿Y yo? ¡Protege mi vida!".

La Conferencia Episcopal cree que con la nueva legislación, "quienes van a nacer quedarán todavía más desprotegidos". Martínez Camino ha explicado que la vida humana "no debe ser menos protegida que otros bienes" como la flora o la fauna.

Con esta campaña se han enviado 30.000 carteles para parroquias y centros católicos de toda España, y se han colocado anuncios en 1.300 vallas publicitarias de 37 ciudades españolas, además de repartirse en las diócesis un total de 8 millones de folletos.



Así que después de atacar el aborto, y decir que los niños están menos protegidos que el lince ibérico (especie por cierto en peligro de extinción), me encuentro con la siguiente noticia:

Cuatro alumnas denuncian por abusos sexuales al sacerdote que les daba religión

* Los forenses consideran verosímiles los relatos de las menores.
* El cura fue condenado en 2006 por tocamientos a una joven deficiente.
* La petición de condena es de diez años de cárcel.

EFE. 16.03.2009
Los médicos forenses han considerado verosímil el relato de las cuatro alumnas menores que denunciaron abusos sexuales del sacerdote de Igualada Gregorio S., ya condenado en 2006 por someter a tocamientos a una joven deficiente.

En el juzgado de lo penal número 2 de Igualada ha concluido el juicio contra el capellán, en el que, a la vista de los informes forenses, tanto la fiscalía como la acusación particular que ejercen las familias de dos de las alumnas han mantenido su petición de condena para el sacerdote, diez años de cárcel en total.

El cura, de 57 años, cuenta con una condena firme de dos años de prisión por haber abusado sexualmente de una feligresa discapacitada cuando era sacerdote de la parroquia de Fátima de Igualada, pero, como hasta ahora carecía de antecedentes, no ha llegado a ingresar en la cárcel para cumplir esa pena.

La Fiscalía pide ahora una pena de cinco años y dos meses de prisión para el sacerdote por abusos sexuales continuados a dos alumnas de diez años del colegio Gabriel Castellà, de Igualada, a las que daba clase de religión.

Además, en la causa se han presentado como acusación particular los padres de otras dos alumnas del colegio que también denunciaron por tocamientos al párroco y que piden una condena de cinco años y dos meses de prisión para el imputado.

Pese a estar ya inmerso en ese primer proceso judicial, la Diócesis de Vic (Barcelona) mantuvo como profesor de Religión a Gregorio S. hasta el año 2004, cuando la Generalitat lo inhabilitó para ejercer la docencia debido a las denuncias que presentaron contra él varios padres de alumnas. La acusación particular mantiene que esos nuevos casos de abusos no habrían sucedido si la Iglesia hubiera apartado antes al párroco de la docencia, por lo que solicita que se declare a ésta responsable civil subsidiaria.


¿Para eso quiere la Iglesia que no haya abortos? ¿Para que haya más niños católicos de los que abusar? En lugar de echar al pederasta, no sólo que no le echan, sino que le mantienen en el cargo, junto a niños. Estas niñas estaban peor protegidas que el lince, ¿verdad señores obispos?


Trackback URL

1 comentario:

  1. Si los curas comieran piedras del río, no estarían tan gordos los tíos jodíos... (Rememorando a Gomaespuma).

    Una sarta de ostias le había metido yo al cura, que no se acercaba a un kilómetro de un niño el resto de su vida.

    Y la Iglesia... ¡manda huevos! Luego se quejan de que cada vez hay menos feligreses. ¡Cojones! Pues si no obran, ya no digo con caridad y bondad cristianas, que sería pedir mucho, sino con un poco de razocinio, las cosas irían algo mejor. Mira que son burros... Sin generalizar, que alguno hay que se salva... (El que efectivamente come las piedras del río, en sentido figurado).

    ResponderEliminar

Se respetuoso con los demás.
Todo spam será borrado.